Berenjenas con Miel de Caña

Las navidades malagueñas serían unas fiestas incompletas sin la presencia de los borrachuelos en la mesa. Se consumen tanto fuera como dentro de casa, en reuniones familiares al calor del aguardiente.

SABROSO CONTRASTE

Entre las berenjenas y la miel de caña existe mucha química. Dan fe de ello las exquisitas mieles de caña de toda la vida. El ingenio de azúcar, que hizo historia a nivel industrial al sur de Málaga, proporciona un ingrediente que, al encontrarse con la berenjena frita, la complementa de manera especial. Fritura y dulzura dotan a la verdura de un sabor extraordinariamente rico, con reminiscencias orientales (árabes o indias, depende de las fuentes).

Los contrastes suelen ser interesantes. El caso de esta propuesta culinaria, divina para el picoteo, no es una excepción. Crujiente a la vez que suave, estas berenjenas que algunos denominan “abuñueladas” -o en su versión tempura, gracias a la globalización culinaria- son la firme demostración de que la verdura no es, en absoluto, aburrida.

Receta

Ingredientes

  • Berenjenas
  • Aceite de oliva virgen
  • Sal
  • Harina
  • Miel de caña

¿Cómo se prepara?

Se lavan las berenjenas, para luego cortarlas en rodajas finas (se pueden cortar también en taquitos alargados y sin piel). Se sazonan y se dejan macerar un ratito. Después de escurrirlas, se enharinan mientras calentamos el aceite. Una vez fritas es necesario servirlas ipso facto, con un poquito de miel de caña por encima.